Para muchos superar el fin de una relación por la ruptura con la persona a la cual hemos querido o por su fallecimiento no es nada fácil, son muchos los momentos buenos que dejamos atrás y eso suele hacernos revivir grandes recuerdos de cuando sentíamos que esa relación era plena.
La ruptura o separación no deseada de una persona enamorada puede constituir un acontecimiento que remueve momentos hermosos y turbulentos a la vez, este movimiento puede causar ansiedad, estrés, tristeza, rabia y hacer emerger de nosotros emociones antiguas de abandono que pueden alterar nuestro equilibrio psíquico y emocional.
En un periodo de tiempo se percibe que la magia que en un principio sentíamos desaparece, se deja de sentir interés sexual, y aquella persona maravillosa que sentíamos ideal, ¡ha dejado de gustarnos!, ha dejado de seducirnos, puede que hallamos desviado nuestra mirada hacia otra persona que acaba de aparecer en nuestra vida.
¿Sientes excitación por una nueva aventura, por desear algo nuevo con incapacidad de ser fiel a una persona o proyecto; la relación ya había “fallecido”? En Avanza Gabinete Psicopedagógico cada vez son más frecuentes las consultas para brindar ayuda por conflictos de pareja con la finalidad de verlo desde una forma más optimista. ¿Tienes alguna historia similar? ¡Queremos escuchar tu historia!; y ofrecerte nuestra ayuda.
Entendemos que terminar una relación es despedirse de alguien con quien nos unía un fuerte vínculo ya que, dada la intensidad la persona amada llega a formar parte de un mismo ser, tantas emociones llenas de promesas, ilusiones rotas que nos hacen desear desaparecer; como consecuencia buscamos renacer o reinventarnos. Podemos aprovechar esta ruptura para cuestionar en profundidad mis creencias y expectativas relacionadas con la pareja y analizar nuestros patrones para emerger de una forma más sana y libre que nos permita vivir el amor de pareja de una forma más coherente.
El dolor (duelo) es indefinible, un proceso que sólo conocen aquéllos que han pasado por esta experiencia, pueden aparecer intensas emociones de desgarro y abandono; no obstante debemos tener presentes que somos adultos y si tomamos nuestra responsabilidad comenzaremos a percibir que sólo nosotros podemos abandonarnos a nosotras mismas. La otra persona puede irse de mi vida y al mismo tiempo yo tengo recursos para seguir viviendo, potencialidades que explorar y nuevos horizontes.
El dolor duele, atenderlo, sentirlo y respetarlo es humano y me va a permitir crecer como ser consciente; Sin embargo la culpa y el victimismo me estancan en un círculo de inconsciencia. La vida sigue amigas mías, perdonemos y olvidemos lo que sintamos que nos han hecho, perdonémonos a nosotras nuestros errores y dejemos atrás lo que no sirve. El camino es luminoso para las que viajan con carga ligera. Acoge y agradece tu llanto como signo de liberación emocional, háblate con cariño y respeta tus tiempos, imaginate que estás acompañando a tu niña interior a crecer y madurar, sentir el dolor nos permite liberar espacio para que más Amor pueda llegar.
Un término para expresar las dificultades que se sufre es el de la sensación de desgarro de la propia alma, como si te la arrancaran sin piedad, ¡sobra decir que esta emoción puede percibirse como inmensa y desoladora! Por eso se expresa que el proceso de duelo es personal, para ello es importante entender que solamente un Psicoterapeuta experto en duelos puede ayudar de forma eficiente a la persona a aprender a aliviar cualquier proceso doloroso en una relación que se haya podido complicar, alargándose, estancándose o expresando una intensidad insoportable. Si percibes algunas de estas dificultades en tus propios procesos de duelo consultanos y podremos orientarte respecto a los mismos.
La mente invierte todo su tiempo en repasar hasta la saciedad la película del pasado, donde invierte recursos y energías en recordar lo mejor: aquellos momentos inolvidables, mágicos, de pasión, de entrega incondicional, tratando de buscar explicaciones sobre la nostalgia que invade el pensamiento monotemático, obsesivo, permanente. En esos momentos se pierde una gran parte de vida, por tanto: no se duerme, no se come, no se vive. En algunas relaciones la ruptura supone una gran liberación para quien la decide, tras una relación destructiva, patológica. En muchos casos aparecen interrogantes y sentimientos de culpa, propia o ajena con conciencia de ser tratado de manera miserable, cruel, inhumana, donde prevalece el sentimiento de que nada sirve, nada vale, y comenzamos a culpar a nuestro entorno de que no consuela, este tipo de sentencia creada es reversible y necesitamos revertirlas para poder liberarnos.
Los celos
Si la ruptura es por este motivo y la inseguridad de no tener la certeza de si son celos fundados o infundados, párate a pensar que puede tener solución. Lo primero antes de nada en hacer terapia de pareja o si crear que los celos son infundados tiene un problema de confianza y necesitas poder encontrar el porqué de esos celos, hay otras opciones tan válidas como la terapia y pasan por contratar a un detective privado o hacer uso de la tecnología como puede ser el polígrafo, este último método siendo una forma de descubrir la verdad, siempre hay que hacerlo con un poligrafista acreditado y bajo las más estrictas medidas de privacidad, este método es voluntaria y siempre bajo un acuerdo de confianza en la pareja.
LA SEPARACIÓN Y LAS ETAPAS DEL DUELO
Las 5 etapas del duelo o separación amorosa
1ª La fase de la negación y aislamiento
La negación cuando aparece funciona como un amortiguador después de la noticia inesperada e impresionante de la conmoción inicial; es una clase de anestesia. Nos invita a tomar tierra e ir asumiendo nuestra propia experiencia, la primera fase del camino es asumir lo que hay con valor y voluntad.
2ª La fase de la Ira o rabia
(resentimiento, rencor, incluso ideas de venganza)
Esto es un tema cotidiano ante lo que se vive con total indefensión, lo que se entiende como una grave injusticia, suelen pensar en hacer daño al otro/a y pensar de la siguiente manera: “yo sufriendo un infierno y él/ella de rositas”. Los profesionales debemos explorar todas las ideas suicidas y homicidas presentes con cierta frecuencia en duelos difíciles. La rabia debe ser contemplada y expresada en un medio seguro sin culpar a nadie de ella. Estas emociones que emergen tras la ruptura suelen tener que ver con la acumulación de experiencias dolorosas que llevamos dentro. Soltar y expresar la rabia de forma segura puede liberarnos.
3ª La fase del Pacto
Esta fase se puede entender y abordar de muchas maneras dando paso con el tiempo a una buena amistad especial, o cortar la relación del todo y para siempre. Incluso esperar una segunda oportunidad. Por ejemplo, un caso donde 18 años después una mujer llamaba al novio de su juventud y lloraba amargamente tras dos relaciones desdichadas. Suele creerse que fue un error el haber roto tan romántico romance de tiempos atrás. Es importante valorarse a una misma y confiar en que hice lo mejor que pude hacer y descanso en que está bien así, al igual que tu lo hiciste lo mejor posible. Nos toca avanzar.
4ª La fase de la Depresión
En principio los sentimientos anteriores dan paso a una gran sensación de pérdida irreparable donde se ha perdido el bien más preciado o el ser amado. Buenas noticias, no solo es reparable sino que puede integrarse al darnos cuenta que la vida es más grande y que esas emociones de dolor nos hablan de nuestra capacidad de hacernos cargos de ellas, asumirlas sin culpar al otro e ir más allá.
5ª La fase: de Aceptación
La aceptación sana viene cargada de gratitud por lo vivido, de experiencias aprendidas, de un dulce recuerdo y de los mejores deseos para esa persona que estuvo en nuestra vida. Desde aquí agradezco a todas las personas que formaron parte de mi vida pues gracias a ellas pude crecer y ser cada vez más íntegro y libre. El camino a la aceptación está asfaltado por la responsabilidad que nos invita soltar la culpabilización propia y ajena.
Os planteo una nueva visión, un nuevo paradigma relacional en el cual la pareja ya no es un otro que está en mi vida para cumplir mis expectativas y adaptarse a mis exigencias. Sino que la pareja es un compañero y compañera de aprendizaje con la cual coincido durante un tiempo determinado en una etapa de mi camino, esta persona me va a mostrar los mejores y peores aspectos de mi personalidad.
Aceptándola a ella me acepto a mí misma, respetando nuestra diferencias me respeto a mí y el Amor ocurre como fenómeno natural expresándose en respeto por el otro que es diferente a mí y en el fondo desea lo mismo que yo; Ser feliz, aunque su manera de buscar esa felicidad es distinta a la mía también es tan válida como la mía.
Si nuestro camino es estar juntos eso haremos durante el tiempo que corresponda cuando nuestros caminos se separan te agradeceré lo experimentado y aprendido y te dejaré ir, dando espacio a un dolor calmado y agradecido, a unas lágrimas de gratitud que en el futuro alumbraran los caminos de todos los seres que se unan para aprender en esta hermosa aventura. El verdadero Amor no espera nada y en esta libertad es donde podemos sentir que la vida nos llena.
Otras Secciones de interes
Contacta con nosotros pide tu cita ahora por whatsapp dar el primer paso es así de fácil.